OPINION: Ayer el polvo del muelle nubló a Barahona

Por Praede Olivero Féliz

Ayer pasé yo por el malecón de Barahona junto a Otilio Agramonte y el polvo que salía del muelle nubló a Barahona y nos envolvió.

Pensamos y comentamos cómo afecta ese polvo la salud de los barahoneros, particularmente a la gente de los barrios La Playa, La Hortaliza, El Mercado, El Mercado y otros cercanos.

Recordé las enfermedades que provocaba el polvo de la sal y el yeso que se exportaba a cielo abierto desde el muelle y que ahora la cosa está peor con las exportaciones de materias primas, minerales y productos terminados.

Vimos camiones regando la Avenida Enriquillo o malecón, pero eso no resuelve nada, porque se hace lodo en la vía y no resuelve el problema del polvo que circula con el aire y provoca las enfermedades.

Recordé que un ciudadano del barrio la playa, cuando funcionaba sal y yeso con su polvareda, fue al hospital con problemas respiratorios, le hicieron una radiografía y como una gran mancha le salió reflejo el yeso inhalado de aquel polvo maldito, como el actual, que finalmente le provocó la muerte y estoy seguro que eso mismo le pasó a otros ciudadanos barahoneros.

Ahora que re Presidente de la República, Luis Abinader dio el primer picazo y el Ministro de Turismo repicó, para remodelar el muelle y así puedan venir los cruceros a Barahona, es necesario pensar  y platearse si el turismo, la basura, el polvo, los minerales y demás contaminantes son compatibles, sinceramente yo creo que no.

Cómo sé que hay unos cuantos barahoneros que piensan con sus bolsillos y otros contaminantes sus estómagos, no quiero plantear que se elimine totalmente esa actividad productiva que nos mata, sino que se regule, que se someta al imperio de la ley y a que se traslade a Puerto Alejandro, un puerto natural, lejos de la ciudad y las zonas urbanas de la provincia, cerca de la mina de sal, así el polvo del muelle no nublaría a Barahona o al menos al malecón y barrios aledaños.