Los fundamentos filosóficos de los partidos políticos de la República Dominicana
Los fundamentos filosóficos de
los partidos políticos de la República
Dominicana, difieren bastante de la praxis de la mayoría de sus militantes. Los
principios que deben llevar a unos criterios bien definidos en la vida
partidaria, han sido olvidados.
Si nos detenemos un poco a pensar
sobre el quehacer cotidiano de la política dominicana, de manera especial de la
barahonera, nos quedamos sorprendidos al ver las luchas de intereses personales
que ocurren en el interior de los partidos.
Si recordamos lo que dijo el
padre de nuestra Nacionalidad, Juan Pablo Duarte, sobre la política,
refiriéndose a que después de la filosofía, ésta es la ciencia más pura y digna de ser aplicada para la búsqueda del bien
común. Nos quedamos anonadados, por no decir avergonzados de la práctica
política en nuestro país.
Si hacemos un recuento de los
acontecimientos que se están suscitando en América Latina: Bolivia, Uruguay,
Nicaragua, Ecuador, etc.; tenemos que reconocer que en nuestra querida
República Dominicana, se está dando un fenómeno inverso en cuanto a la
distribución de los recursos del Estado.
Bolivia acaba de celebrar
elecciones, en las cuales la reelección del presidente Evo Morales aplastó al
candidato opositor ¿Por qué ocurre eso? Sencillamente es un hombre que defiende
a su pueblo, que los recursos son bien distribuidos. Está en el proceso de
nacionalización de sus empresas. No los entrega a una oligarquía con apetencias
desmedidas, como la nuestra.
Bolivia tiene un presidente que
no es bachiller, no conceptualiza; pero todos sus recursos van a beneficiar a
los más necesitados. Por tal razón, de ser el país de América Latina, que
competía con Haití en pobreza, pasó a ser uno de los que más personas ha sacado
de la indigencia, en orden porcentual.
Entonces, nuestro país en los
últimos años tiene menos ricos; pero muchos más ricos y mucho más pobres. ¡Eso
que hemos tenido un gran crecimiento económico! La sangre, aunque se diga otra
cosa, es roja y no rosa su color natural.
En otro momento analizaremos
algunos de los países del área, que en los últimos años han ido logrando su
total emancipación.
Cuando me detengo a buscar el
significado de algunos términos muy utilizados por los políticos, encuentro lo
siguiente:
Política: Expresión concentrada
de la lucha de clase. Búsqueda del bien común.
Politiquería: Hacer política de
intrigas y bajezas. Acto impropio realizado por un político. Abarca todo
lo pernicioso de cualquier político.
Mercantilismo político: Se define
como sacar ventajas en tratado de libre comercio.
Militante: Persona que pertenece
a una determinada ideología, grupo o partido político.
Ejemplos de militantes:
Juan Pablo Duarte, creyó
firmemente en sus ideas independentistas.
Los mártires cristianos, que
murieron por su convencimiento religioso.
Nguyen Van Troi, militante
comunista, vietnamita, que fue ejecutado por defender su ideología.
Quisiera que el amigo lector
pueda analizar tranquilamente, ver la diferencia entre política y politiquería.
Militante y “pica pica”. ¡Sea usted el jurado!
La compra y venta de personas, el
cruce de un partido a otro, de una tendencia a otra, las denuncias e intrigas
entre miembros de un mismo partido, las calumnias, las mentiras y difamaciones.
Llámelas como usted quiera; pero nunca será Política; aunque nos quieran meter
en esa pocilga politiquera.
Termino haciendo un ferviente
llamado al pueblo de Barahona, mi pueblo, a que nos unamos en una gran cruzada
por el Rescate de la Perla del Sur, uniéndonos todos a la candidatura del Dr.
Praede Olivero Féliz a la sindicatura de Barahona. Creo firmemente que nos
queda una carta por jugar, que no podemos tirar la toalla, hay que tomar el
gobierno municipal para servirles a los más pobres, a los olvidados; pero que son los que
deciden.
La Alianza para el Rescate de
Barahona es la esperanza de un pueblo, cuyos barrios están a oscuras, sin
aceras ni contenes, sin farmacias populares, sin comedores para los pobres
indigentes, sin panaderías populares, sin funerarias para velar dignamente a
sus muertos, sin representación barrial para hacer un verdadero ayuntamiento
con un presupuesto participativo.
Dios les ilumine y que las
funditas, cajitas y los chelitos, no nos hagan pasar cuatro años olvidados, por
los que creen que el poder es herencia de ellos.